sábado, 8 de marzo de 2014

Capitulo 1: Ilusión nada más


¿Por dónde empezar? Bueno, yo jamás me imagine de esta manera, jamás pensé que algo como esto fuera a pasar, jamás creí querer a alguien tanto, jamás creí hacer las cosas que hice por él… Al principio todo era bonito, ya que sólo era cuestión de esperar un tiempo no definido, pero no muy largo, eso es lo que yo creía. Cada palabra que salía de su boca me la creía, yo tenía un futuro planeado con él. Pasaron tantas cosas, cosas que me hacían creer que esto pasaría, cosas que sólo se les puede llamar de una manera, ilusión.
La ilusión tiene una estrecha similitud a la esperanza. La ilusión es una idea que surge en la cabeza de la persona de algo que no existe en su totalidad; es decir que es una percepción deformada de la realidad. La realidad mata toda ilusión, pero también la ilusión mata toda realidad. El mundo se desarrolla a través de ilusiones, ya que sin ilusiones no podríamos actuar, todo sería diferente. La ilusión decepciona cuando se muestra la verdad, y aquellas sonrisas y miradas lindas quedan atrás…
Muchas veces sólo me disfrazaba de fuerte, para no lastimarme más. Quería hacerme creer que todo estaba bien, que no importara todo lo que estaba sufriendo, que todo saldría bien, que no me importaba nada, pero subconscientemente sabía que nada estaba bien, que me estaba lastimando y al fingir que no me dolía, dolía el doble. Y si dije que no me importaba es porque realmente me importaba, y si dije que no me dolía es porque estaba destrozada.
La ilusión que me otorgaste fue la razón por la cual ahora estoy así.
Sueños y realidades, ilusiones y desilusiones, ironías y alegrías… Relatividad y creencia; tú y yo. No destruyas este sentimiento que parece absurdo, pues para mí es algo definitivo. Me canse de demostrarte que yo doy todo por ti, sin embargo, con ese cansancio digo día a día ilusionándome cada vez más y queriéndote a diario. ¿Ser fuerte? Sí, pero también sensible.
Me quede esperando algo que no llego jamás, y que jamás llegará, ilusión nada más.
De tantas ilusiones que yo me hacía, olvide donde en verdad vivía. Es una ilusión decepcionante.
No logro decir lo que quiero realmente expresar, es muy complejo, es algo que ni yo entiendo, que todo este tiempo perdido, jamás lo he entendido, no sé porque actuamos de esa manera, no sé porque a pesar de todo lo malo y lo decepcionante que sea algo, sigues ahí sin rendirte.
Tantas veces pensé en rendirme, y después pensaba en la razón por la cual seguía luchando; él era la razón, sólo él, no importaba lo que los demás opinaran o pensaran, porque yo estaba convencida de lo que hacía, yo sabía porque lo hacía, aunque ahora realmente no entiendo porque lloré y lloré, y seguía ahí, sabiendo que no hacia lo correcto, pero ¿Por qué? Porque seguía queriéndolo como si fuera la única persona en todo el mundo, no lo entiendo, pero nadie puede entenderlo.
Todos dicen lo mismo cuando algo llega a si fin, era el destino y el ciclo tenía que terminar… Pero qué diablos sienten ellos, ni sólo un poco de lo devastada que me pondré sentir yo; porque ellos no sienten lo que yo siento, porque ellos no han pasado por lo que yo he pasado, porque ellos no han hecho lo que yo hice por él, porque ellos no pueden ponerse en mí lugar porque jamás lo han estado, porque yo y sólo yo sé exactamente lo que siento por esa persona y de lo que sería capaz, porque yo sólo yo sé porque me he mantenido al margen todo este tiempo, porque es mi vida, es mi problema, y es algo que sólo yo puedo resolver, nadie más puede influir en mis decisiones.
Aunque no quería comprender, aunque quería seguir viviendo en esa ilusión, ahora logro al menos entender que esto era lo que tenía que pasar, pero realmente duele que haya hecho mí mejor esfuerzo por algo que al final no será como lo imaginaba, que no era lo que yo esperaba, pero que ahora comprendo que es lo mejor para ambos, que siempre fue lo mejor para ambos, pero no me arrepiento de nada de lo sucedido, si duele todo eso, pero no sabría decir si fue tiempo perdido o no, porque en ese tiempo que “perdí” esperando por esa persona que nunca llegará, también gane muchas cosas, porque cuando estaba con él, todo era lindo, pase tantos momentos con él , que llego a ser la persona en la que más confiaba, la persona que más quería y que no se igualaba al querer de otra persona, la única persona que me hizo sentir esto, y me enseño tantas cosas, también me enseñó que no debes confiarte en las palabras si no lo demuestran, que no debes esperar nada de nadie, porque puedes llevarte una desilusión, me enseñó que hay muchas personas que no les importa cómo te hagan sentir, pero hay personas que pueden cambiar sus sentimientos en segundos, o más bien que no saben querer, porque no creo que puedas querer a varias personas y sentir exactamente el mismo sentimiento, con la misma magnitud, no lo creo posible porque a mí jamás me ha pasado, porque yo no soy así, porque las pocas veces que he querido a alguien sólo lo he querido a él, porque es la primera vez que realmente me duele lo que pasa, es la primera vez que daría mi vida por alguien, sin importar lo que hayan hecho por mí, porque en este caso no sería mucho.
Es triste cuando te das cuenta que no eres tan importante para alguien, como tu pensabas.
Esperar algo es como sentir un vacío mientras no tienes ese algo contigo, eso yo lo sentí mucho tiempo y en realidad no sé cuando dejaré de sentirlo, porque aunque sé que no llegará, sigo ahí con la esperanza de que algún día suceda eso imposible que quiero que pase. Yo sólo quería pensar que algún día todo esto funcionaria, pero para mí cruel realidad sólo quede esperando algo que jamás iba a resultar. Por un lado quiero olvidarlo, pero por los otros sé que es la única persona en todo el universo que podría hacerme feliz en estos momentos.
Ya no sé qué pensar, un nudo de emociones me ha vuelto a conformar.
Muchas personas me dijeron desde un principio que él jamás llegaría, que ahora me dicen “te lo dije” y lo único que puedo decirles es que lo intenté, y me siento orgullosa de decir que intenté algo que era imposible, que lo sabía, que a pesar de tantas personas ofendiéndome e hiriéndome con comentarios estúpidos, ¡Lo intenté! Que a pesar de todo lo que paso, de las veces que lloré, de las veces que me decepcioné en silencio, de todo eso me siento orgullosa, porque lo intenté, tuve el valor de intentarlo, y eso vale mucho más, si no lo hubiera intentado viviría con la duda de…
“¿Qué hubiera pasado?” para que quedarnos con la duda si puedes resolverá con tan sólo intentar, y esas personas que ahora me dicen eso, les pregunto “¿Han intentado algo por el estilo?” realmente no sé como las personas pueden juzgarte sin ni si quiera saber las razones por la que lo haces o sin ponerse en ese lugar, esas personas en algún momento estarán así y comprenderán lo que digo, comprenderán que nadie puede juzgarte sin conocer todo lo que piensas, ¡Nadie puede juzgarte sin ponerse en tu lugar! Y nadie puede guiarse por lo que dicen los demás en vez de guiarse por lo que uno realmente quiere, ¡Nadie! Sólo tú sabes que debes hacer y sólo tú lo harás, nadie más.
Vive tu vida sin esconderte, vive tu vida siento tú, que no te importe lo que digan los demás de ti, independientemente de lo que sea lo que te avergüence, se valiente y deja de vivir por los demás… Si vives por los demás lo único que demuestras es que por ti no puedes pensar.
Y para esas personas que han hecho cosas que no querían por lo que decían los demás, y ahora sólo se arrepienten sólo puedo decirles que de los errores se aprende, ¿Por qué lo sé? Porque yo he aprendido tantas cosas en estos últimos meses, he aprendido que la vida es muy dura, y que muchas veces no sale como uno quiere, pero que para todo hay solución, y que realmente todo en esta vida deja una lección, que mientras una puerta se cierra otra se está abriendo y esperando a que pases, que hay tantas bellas razones por las cuales debes seguir adelante, tú no debes esperar de nadie, no debes depender de nadie, porque sólo eres tú, sólo tú sabes que es lo que quieres, sólo tú, nadie más, no guiarse por los comentarios, no cuentes con nadie, está denominado que las personas que no esperan nada de nadie son más felices, ¿Por qué?
Porque no viven de ilusiones que al final se convierten en desilusiones que te marcan de por vida, aunque como ya dije, todo sirve, si no cometes errores, no aprendes, y si no aprendes, no cambias. No dependas de nadie en este mundo, porque hasta tu sombra te abandona cuando estás en la obscuridad. Las lecciones más importantes de la vida son las que normalmente se aprenden de la manera más dolorosa. Vive tu vida, que al final nadie morirá por ti. No vivas para los demás. Y si dejas un momento de silencio pondrás escuchar eso que muchas veces te niegas a escuchar.
¿Quieres hacer algo? ¡Hazlo!, aprende a no llorar por algo que no vale la pena, no te contamines con cosas que no necesites, no temas perder algo que no tienes, todos los caminos te pueden entregar algo, muchas cosas las puedes cambiar simplemente cambiando de actitud, no te ilusiones, no esperes nada de nadie y no decepciones a alguien que haría cualquier cosa por ti.
Quizás lo que crees que quieres no es lo que realmente quieres.
Nunca quise ser la clase de chica que lloraba con facilidad, a la que podrían herir sin esfuerzo, siempre he tratado de esconder esa vulnerabilidad, siempre trate de ser fuerte. Pero simplemente un día mis ojos se volvieron fríos, mí rostro reflejaba tristeza, y esa tristeza se fue apoderando de mí, dejándome sin escapatoria, obligándome a tragarme cada día todo el sufrimiento que aún padezco, que aún sigue aquí, que nunca se ha ido, ese sentimiento que se quedo impregnado en mí y que no sé cuando partirá.
Un día comprendí, que un silencio vale más que mil palabras, que tomar una mano no significa atar un corazón, que el amor te lo deben demostrar, que el amor sólo fluye en dos personas, que cuando dos personas están destinadas a estar juntas no importa el tiempo, donde estén, o con quien estén, tarde o temprano se encontrarán… Ahí es donde comprendí que nosotros no estábamos destinados para eso y que no lo estaremos, que probablemente sea el fin del “nosotros” que construimos a nuestra manera, pero que es lo mejor para ambos y que por algo pasan las cosas.
Comprendí que aunque quieras mucho a una persona, y sienta que para mantener a esa persona a tu lado, tienes que sufrir, sacrificar tu esencia y hasta rogar, aunque te duela, retírate.
Y no tanto porque las cosas se tornen difíciles, sino porque quien no te haga sentir valorado, quien no sea capaz de dar lo mismo que tú, quien no pueda establecer el mismo compromiso, la misma entrega, simplemente no es para ti.
También comprendí que hay que mirar bien lo que has perdido, pues créeme jamás lo recuperaras. ¿Por qué cuesta tanto ser tú? Y todo para que la sociedad acepte un estereotipo de lo que no eres, Bueno una sociedad de hipócritas, miedosos y para acabar tontos.
De la nada puede suceder un todo. Cuando alguien quiere algo, debe saber que para todo hay riesgos, para todo hay ganancias y para todo hay pérdidas. Nuestra vida es lo único que nos pertenece. Aprendí que no hay que desperdiciar tiempo de vida en cosas que no valen la pena, en cosas que sabes que la estás desperdiciando y sin embargo, lo haces. También hay que saber que personas realmente son tus amigos y puedes contar con ellos.
Esa persona que menos esperas, puede ser la persona en la cual confiaras; esa persona en la que más confías, puede ser la que te está traicionando. La vida está llena de personas falsas que cuando realmente las necesitas te darán la espalda, y es difícil darse cuenta hasta que pasa algo y sabes que no contaras con su apoyo, realmente son pocas personas en las cuales debes confiar, pero saber en qué persona confiar y en qué persona no confiar. Por desgracia sólo puedes saber quiénes son verdaderos amigos cuando estás en malas situaciones, sólo hay que recodar que “Cuando el barco se está hundiendo las primeras que salen corriendo son las ratas”.
Pero bueno, el punto de esto era hablar sobre el error que siempre cometo y nunca supero.
Él, culpable de mis ilusiones y desilusiones, de mis sueños y anhelos… Él, mí constante deseo irrealizable. Voy recogiendo experiencias, caminando y tropezando… Cambiando de vía y equivocándome día a día, pero así funciona esto, de las equivocaciones vivimos.
Quiero gritar, y sentir que las palabras sólo se las lleva el viendo, sin antes ser escuchadas.
Juego a ser fuerte, pero todo juego tiene su límite y su fin.
¿Qué me ha pasado? Es que no es posible que no pueda durar ni un minuto sin pensar en ti, sin ilusionarme, sin pensar en qué pasaría si el futuro nos juntara por fin. ¿Qué puedo hacer? Lo he hecho todo, eso ya no depende de mí. Descubro simplemente la verdad y más absurdamente la fragilidad que hay en mí ser de una triste ilusionada más.
No todo tiene siempre un final feliz.
De pequeño te enseñan a no rendirte por nada, a creer en ti y en lo que quieres. Crees en la magia, en los cuentos de hadas, en todo que todo lo que quieres lo vas a acabar consiguiendo porque eso fue lo que te enseñaron, pero no te enseño el lado oculto. Nadie habla nunca de este otro lado de la vida, pero está presente, cada vez más. A medida que vamos creciendo dejamos de creer en la magia, en los cuentos de hadas, en todo lo que antes creíamos…
Dejamos de guiarnos por nuestros sentimientos y nos empezamos a guiar por la razón. Es entonces cuando los posibles de antes, se convierten en imposibles y los siempre en un determinado periodo de tiempo, que en realidad no sabemos si será mucho o poco. Así es la vida, lo que antes hacíamos que fuese perfecto, ahora ya n lo intentamos. De las personas que menos esperas una apuñalada, pueden ser las personas que llevan tiempo haciéndolo, lamentablemente en esta vida no se puede saber realmente las intenciones que tiene una persona, lo que piensa, lo que quiere, nada de eso lo podemos saber, por eso es difícil darse cuenta de esas personas que no valen la pena, pero con el tiempo, a mediados de experiencias te das cuenta que la cantidad de personas con las que puedes contar, es muy pequeña. A veces las cosas buenas se terminan, para que otras mejores puedan empezar.
Ahora sé que mientras más te esfuerces en olvidar algo, más lo recordarás inconscientemente.
Aprendí que no hay que dejar que las críticas arruinen tus sueños, da lo mejor de ti. Habrá mucha gente que te dirá que no vas a poder. Lo que tú tienes que hacer es darte la vuelta y decir “mírame”. Al final, las mascaras siempre se caen. La vida irá hacia adelante cuando te apartes de las personas que te llevan hacia atrás.
“Echando a perder se aprende” pero cuidado con lo que hechas a perder, luego lo tienes que reparar. Las cosas malas que haces, las veces que mentiste, las veces que actuaste mal dejan un “agujero” en alguna parte. Pero la vida es corta, y no debes dejar que toda tu vida se vaya en un sólo problema o en una sola persona. Pero como ya dije debes guiarte por lo que quieres. No se gana sin arriesgar, y nunca se pierde cuando se ha intentado. La felicidad no se encuentra en la cima de la montaña, sino en cómo subir.
Una lágrima es demasiado importante como para derramarla por alguien que no vale la pena, aunque eso no podemos controlarlo, porque nosotros no elegimos a la persona, ¡Mírame! Por cuanto he pasado, cuántas lágrimas he derramado y sin embargo… Pero puedes aprender mucho de tus malas experiencias. Los fracasos nos recuerdan que somos humanos, las decepciones nos indican que no era lo que creíamos o idealizamos y la risa indica que nada de lo anterior nos ha quitado las ganas de vivir y ser felices. Uno de los mayores placeres de la vida es lograr aquello que otros dijeron que no lograrías, no te detengas por los demás.
Muchas personas se sienten mejor con decir que la persona equivocada no las “merecía” eso es algo muy tonto, ya que para que hablar mal de alguien que en algún tiempo fue lo más importante para ti, si fue la persona que te acompaño en tus peores momentos, que te levanto después de una caída, que aunque estaba fastidiado siempre tenía una sonrisa para ti, y un consejo en la mando, ¿por qué decir que fue malo?
¿De verdad necesitamos a alguien que no nos necesita? No lo sé. Según Marilyn Monroe, no. Pero a veces eso pasa. Extrañas a alguien que no te extraña a ti. ¿Alguna vez les ha pasado? Que les dejen de hablar sin ninguna razón aparente. Es confuso. Yo le doy vueltas a mí cabeza una y otra vez, con todas las risas, las cosas que pasamos ¿no significaron nada? Es como, si todo lo que pasamos nunca hubiese sido gran cosa, si todo lo que hice no fuera nada. Como, si este tiempo se hubiera borrado de su memoria. Pero no queda más remedio que superar, ya que no es posible saber lo que piensa una persona, ni saber porque lo hace, no se puede.
Hay veces que ser feliz no es tan fácil, parece que es lo más fácil del mundo, pero no siempre es así, Para poder ser feliz no sólo basta con sonreír, eso es sólo un añadido. Puedes sonreír sin ser feliz pero no puedes ser feliz sin sonreír. Duele que pequeñas personas o situaciones afecten completamente a un estado de ánimos tan grande como es la felicidad, pero así es la vida de jodida, un día eres la persona más feliz del universo y al siguiente puedes sentirte la persona más desafortunada de todo el planeta.
Sabes perfectamente que no vas a ningún lado sintiéndote así pero son cosas que pasan, cosas que no están apuestas. Y es que los sentimientos no se pueden programar. Nos empeñamos en que todo lo bonito tiene que ser perfecto y eso lo único que hace estropear el momento, la perfecciones es un concepto que está demasiado editado, en realidad lo simple y sencillo es lo que realmente nos hace felices. Al fin y el cabo todos cometemos errores, y tú eres mí error favorito.
Pero sé que encontraré a esa persona que me haga sentir especial, con la que ser tu misma, sentir que no existe nadie cuando estás con él, que te saque una sonrisa hasta en tus peores momentos, sentir ese cosquilleo a cada sonrisa, sé que algún día te encontraré. Aunque a veces me pregunto ¿Cómo hubiera sido mí vida si fuéramos algo más? Un interrogante que aún sigue estando presente. •No esperes nada de nadie o morirás esperando•
Estos meses aprendí varias cosas, muchísimas en realidad. Mi forma de pensar cambio, creo que todo me hizo más fuerte. Muchas veces pase por esa indecisión de hacer lo correcto o lo que en verdad quería. Termine haciendo lo que yo quería, esperarlo. Me contaron una vez que hay personas que mienten tanto que acaban creyendo de sus propias mentiras. Entonces pensé que si sonreía tanto, si fingía que nada me importaba y que no me dolía, acabaría creyendo en mí propia felicidad, y eso es algo demasiado estúpido.
A veces nos hacemos ilusiones demasiado pronto, porque yo recuerdo que no sentía esto que siento por él, que realmente me daba igual con quien estuviera, era una simple atracción. Pero no sé como rayos paso que poco a poco, fue todo lo que necesitaba, poco a poco le fui entregando todo lo que yo podía dar, poco a poco me olvidé de mí, sin ver cuánto daño me hacía, porque nada de eso me importaba, él era todo para mí, y creí que estar así valía la pena, y que algún día todo eso se recompensaría. Quizá no fue el pensamiento más adecuado en estas situaciones, pero era el que a mí me convencía, el que me llenaba de esperanza y me hacía sentir mejor. Lo que llegue a sentir por él fue extraño, era extraño para mí porque jamás había estado así por alguien, jamás había cambiado amistades por alguien, mí lema siempre fue “Primero los amigos” y rompí ese lema sin importarme quien fuera.
Y estoy harta de pretender que estoy bien, que nada de esto me afecta. Sí, cuando estoy con él soy una de las personas más felices, pero después despierto y veo lo que realmente es. Que realmente no sé exactamente qué es lo que él sienta, que no sé qué es lo que piense acerca de mí y de esta situación, que no sé realmente que es lo que quiere, ¡No sé nada!, pero aun así, me arriesgue, aposte todo lo que tenía. Varias veces donde el pensamiento me perturbaba, donde imaginaba las peores cosas, para sentirme tan mal. Al principio todo era lindo, todo lo veía diferente y no sé qué jodidos pasó.
Pero eso sí, puedo decir que alegro tantas cosas, que todas las veces que teníamos esas conversaciones, que estaba con él, que compartíamos tantos momentos juntos, que estando así no pasaba por mí mente otra cosa. Cuando tenía “problemas” cuando estaba destrozada, él era el único que podía sacarme una sonrisa. Todos los días sólo esperaba hablar con él impacientemente. Y sí lo vemos en ese punto, fue una de las mejores cosas que me puso haber pasado, independientemente de lo demás.
Las lecciones más importantes de la vida son las que normalmente se aprenden de la manera más dolorosa. Muchas personas me dijeron lo desilusionadas que estaban por lo que estaba haciendo, sin duda todo eso me dolió. Pero también muchas personas me dijeron que realmente me admiraban, que aguantar todo lo que aguante por una persona, era algo grande, y me sentía tan bien. Tantas personas que se metieron en mí vida, sólo quería aclararte que ¡es mía!, que antes de juzgar mis acciones ponte en mis zapatos, recorran lo que yo he recorrido, vive mis penas, vive mis dudas, mis temores, todo.
Recorre todo el tiempo que yo he recorrido, y tropieza ahí donde yo tropecé, y levántate como yo lo he hecho. Cada quien tiene su propia historia. Y entonces ahí podrás juzgarme. Y duele, tal vez más que al principio. Esfuerzo perdido y confianza perdida en un par de segundos. Tal vez tengo hasta un poco de rencor conmigo misma, porque yo permití que todo esto pasará, yo estaba consciente de mis acciones y sin embargo seguí intentado, seguí tropezando y levantándome, ocultando las heridas más profundas que he tenido, esas que no se ven. Y he de creer que es un dolor innecesario, pero aun así, duele.
Una persona puede aferrarse tanto a alguien que la lástima, y con todo lo que ha pasado, yo creo que es porque una persona se cierra tanto que se hace dependiente de ese amor que la otra persona le brinda, aun siendo destructivo y sin futuro. Ahora sé que es malo decir que alguien es tu todo, porque tú no sabes en qué momento ese “Todo” te decepcionará y te quedas sin nada, ¿Sabes qué es lo que realmente apesta de enamorarte de alguien que sabes que no es correcto para ti? Te enamoras de todas las maneras posibles porque piensas que algún día será diferente.
Yo sólo quería estar contigo, sin importar que obstáculo me impidiera hacerlo, porque siempre trate de cruzar todos esos obstáculos, pero cada vez salían más, y a veces me parecía que tú mismo los ponías. El tiempo te desgasta, te hace creer que todo será bueno, que pase lo que pase estarás feliz, que pierdas lo que pierdas; ganaras algo. Pero no es así, lo perdido no se recupera, y mucho menos el tiempo, el tiempo jamás lo recuperaras, en estos momentos estás leyendo estás palabras, ese tiempo jamás lo recuperaras, lo que leíste hace unos segundos ¡No se recuperará! Ya pasó, y ahora estás ocupando tiempo nuevo, ¿Por qué las personas desperdician tanto su tiempo?
Porque en lugar de llorar por alguien sintiéndose topes no se sienten orgullosos de sí mismos y siguen su vida como si nadie hubiera pasado, como si su único amigo y compañero fueran ustedes mismos. Muchas veces se tiene una sola pregunta “¿A quién le importo?”
Sentir como si no estuvieras ahí, como si nadie te extrañara. Es gritarle a la pared las cosas que no le dijiste a esa persona en la cara y sentirte triste por las cosas más simples. Es que una simple acción de alguien puede arruinar tu día, o inclusive, mejorarlo. Es preocuparte más por cómo te ves, que por cómo eres.
Es equivocarse y tropezarse miles de veces con la misma “piedra“. Es ser querido por mucha gente y no sentirte querido por nadie. ¡Ser adolescente es simplemente el punto donde debes crearte a ti mismo, pero no sabes cómo! Los humanos son, por desgracia imprevisibles. Muchas veces las mejores intenciones causan los peores daños. Muchas veces el primero impulso, no suele ser la mejor acción para elegir, Primero piensa, luego existe.
Se siente del asco levantarse cada mañana y saber que nada va a cambiar, cambiarte sabiendo que tus ilusiones se moverán sólo dentro de ti y que no puedes hacer nada para cambiarlo.
Tantas veces no he hecho las cosas correctas o las que yo quería hacer, sólo por miedo, sí, por miedo a que no resulte como esperas, a que no acabe como tú deseas. Pasar el resto del día lamentándote, distrayéndote con cualquiera cosa que pase por tu camino para no pensar en esa persona…
Intentar desahogarte contándole a tus amigos como te sientes, pero que al final no sirva, que nada de lo que sacaste sirva para sentirte mejor, porque el amor que sientes por esa persona es tan fuerte, tan fuerte que no podría desaparecer así de fácil, que lo ves imposible. Mirar una y otra vez las cosas que te recuerdan a esa persona y morir por dentro, autodestruirte con pensamientos, que sólo eso son, y ver como él está feliz sin importarle nada de eso, y preguntarte si eso fue lo que él esperaba desde un principio, y pensar que lo sigues queriendo tan fuerte a pesar de todo lo que sabes, todo lo que ha hecho, y todo lo que seguirá haciendo, a pesar de saber que no estará contigo y eso nadie lo cambiará.
Que esas personas te digan “te mereces algo mejor” cuando realmente es lo único que yo quiero, que te digan “Hay más peces en el mar” cuando realmente es con el único pez que quieres nadar, que te digan “No le importas” como si con eso se me olvidara cuando realmente no me importa si le importo porque a mí sí me importa y ni él ni nadie lo cambiará. Cuando te dicen “¿Por qué te gusta si sabes que jamás estarán juntos?” y lo único que puedes decir es que las personas respiran aun sabiendo que algún día van a morir.




miércoles, 18 de diciembre de 2013

Prologo

Mi vida sin él es un infierno, en el cual me queman las llamas de su ausencia y me tortura el ayer que ya no está…
Es un infierno en el cual cada recuerdo suyo se transforma en un demonio que me tortura hasta más no poder…
En él, cada beso, cada abrazo, cada caricia, se transforma en filosas dagas que atraviesan mi pecho, haciéndome sentir el dolor que ha sido perderlo…
Pero en el fondo estoy tranquila, pues se que valió la pena tenerlo algún día…
Hoy veo como la malicia se junta con cada uno de los obstáculos que hubo en nuestro camino y se transforman en una gran sonrisa llena de malicia y satisfacción…
Pero no saben que están equivocadas, y por eso, por eso soy yo la que me rio de ellas, pues me basta con haber sentido su amor, con haber probado sus labios y haber sentido su calor… me basta con eso para sentirme ganadora...
No niego que ahora estoy en un infierno por su partida, pero a su lado viví en el paraíso y fui muy feliz, y si este es el precio que tengo que pagar por aquellos días de felicidad, pues gustosa lo pago pues no me arrepiento ni un minuto de haber estado a su lado…

Ahora no me queda más que seguir sufriendo en este infierno que estar sin él, pues nunca, nunca dejare de recordarlo…